Durante una reunión en el Gran Ducado de Luxemburgo Roth calificó ante sus homólogos europeos de ‘gran inconveniente’ la legislación y afirmó que el trato respetuoso a las minorías, incluidas las sexuales, debe estar fuera de toda duda.
La normativa se inserta dentro de un proyecto de ley contra la pornografía cuestionado por varios sectores húngaros por considerar que equipara la homosexualidad con la pedofilia.
Roth recordó anteriores cuestionamientos de la UE contra esa nación por infracciones al Estado de Derecho.
Las decisiones del Gobierno de Budapest. generan dudas sobre la libertad académica así como sobre la la diversidad y libertad de los medios de comunicación, comentó.
De su lado el anfitrión Jean Asselborn, ministro de Asuntos Exteriores del Gran Ducado de Luxemburgo, calificó la reforma de ‘medida muy mala porque contraviene los valores y derechos europeos’. No estamos en la Edad Media, afirmó.
Dentro de Hungría analistas consideran la aprobación de la medida como un triunfo del primer ministro Viktor Orban, de cara a las elecciones de 2022 en la que la oposición intentará presentar una candidatura única para sacar del poder al ultranacionalista.
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