La metrópoli acogerá la primera edición portuguesa de ese evento del 8 al 10 de abril de 2022 en cinco diferentes espacios y, a juicio de los organizadores, resultará una cita única y sostenible con la participación de 25 mil personas aproximadamente.
Los expertos consideran, asimismo, el papel transformador del certamen para la escena cultural, creativa y artística del país y recordaron que es un encuentro para celebrar la música electrónica desde diversidad de experiencias, entre ellas, presentaciones e investigaciones sobre el tema.
De ahí que, además de creadores nacionales y foráneos, la festividad involucre a tecnólogos, antropólogos y científicos, apueste por figuras consagradas y emergentes e incluya exposiciones de arte digital, debates sobre sostenibilidad, iniciativas multidisciplinares, conciertos y materiales audiovisuales.
Sumado a las 26 ediciones en Barcelona, acontecieron 74 festivales en 33 urbes de 30 países desde el año 2002, si bien este año, caracterizado por la difícil situación sanitaria mundial como consecuencia de la pandemia Covid-19 sólo anunció su celebración la ciudad turca de Estambul, el 2 de octubre.
No obstante, los organizadores pospusieron las dos últimas ediciones del Sónar en Barcelona para el mes de junio de 2022 y trasladaron algunas propuestas del programa a las plataformas digitales.
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