Ruíz envió un saludo especial a quienes durante la pandemia de la Covid-19 continuaron la formación de la niñez y adolescencia del país en complejas condiciones.
‘Cada maestro con su esfuerzo, dedicación, capacidad y destrezas ha permitido la formación de estudiantes con conocimientos y habilidades acordes a los nuevos tiempos; además, han demostrado que con su ejemplo de unidad pueden alcanzar las transformaciones que el sistema educativo necesita’, afirmó en una nota oficial de la cartera.
La conmemoración adquiere un sentido especial este año, que se ha caracterizado por un regreso parcial a clases presenciales, destacó la titular de Educación.
En ese sentido, el Ministerio reafirmó su compromiso de continuar desarrollando estrategias ‘para formar generaciones fortalecidas en función de construir el país que anhelamos’.
El Día del Maestro recuerda aquí la muerte de la docente María Chinchilla mientras participaba en una protesta contra la dictadura de Jorge Ubico.
En 1944, el sector magisterial solicitó un aumento salarial y el 25 de junio de ese año organizó una marcha para exigir el cumplimiento de esta y otras demandas.
Ese día, policías vestidos de civil dispararon contra la multitud para dispersarla y una de las balas alcanzó a Chinchilla, quien falleció al poco tiempo, y desde entonces se convirtió en símbolo de lucha del sector.
El hecho fue el detonante para que días después, el 1 de julio, Ubico renunciara a la presidencia de Guatemala.
Mediante el Acuerdo Gubernativo 352 se instauró en 2006 el Día del Maestro como homenaje a Chinchilla y a todos los educadores que, sin contar con las condiciones adecuadas para su trabajo, tratan de sacar adelante a la niñez guatemalteca, sobre todo en las áreas rurales, las menos favorecidas en el acceso a los estudios.
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