Precisó la publicación que los cubanos, pese a la política de cerco, se encuentran en una situación única.
Desde la Revolución de 1959, la isla se centró en la atención sanitaria, entre otros programas sociales. Envía más médicos a todo el mundo que la Organización Mundial de la Salud, agregó.
Pese a acusaciones sobre violaciones de los derechos humanos que propala Washington, los cubanos tienen hoy un servicio integral de salud apoyado en el programa médicos de la familia, reseñó la revista.
Por otra parte, el Gobierno cubano tomó la decisión obvia de no depender de las vacunas extranjeras. A pesar del bloqueo, están avanzando en el desarrollo de sus propias vacunas, las pruebas y la entrega con su propia industria farmacéutica avanzada que exportó vacunas durante décadas, destacó.
La industria biotecnológica y farmacéutica cubana, bajo la coordinación del grupo BioCubaFarma, construyó 14 organizaciones con 78 instalaciones de fabricación operadas por 21 mil 785 empleados, precisó.
Asimismo, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología y el Instituto Finlay, que forman parte de BioCubaFarma, produjeron cinco candidatos a vacunas contra el coronavirus SARS-CoV-2, dos de los cuales, Soberana 2 y Abdala, son particularmente prometedores, apuntó Covert Action.
El artículo elogia los candidatos vacunales Abdala, con una efectividad de 92,28 por ciento contra el coronavirus en la última fase de los ensayos clínicos; y Soberana 2, que muestra una eficacia del 62 por ciento con sólo dos de sus tres dosis.
Es probable que Cuba, subrayó, esté en condiciones de vacunar a su propia población y bruñir aún más su propia reputación científica mediante la exportación de vacunas contra el coronavirus.
Esto proporcionará unas divisas muy necesarias, por no hablar de la ayuda en el esfuerzo de vacunación mundial. Numerosos países, desde Argentina y Jamaica hasta México, Vietnam y Venezuela, están interesados en comprar las vacunas de Cuba. Irán comenzó a producir Soberana 2 a principios de este año, puntualizó.
‘Sólo en el último año, Cuba envió tres mil 700 trabajadores sanitarios, en 52 brigadas médicas internacionales, a 39 países abrumados por la pandemia’, destacó.
A pesar de los avances cubanos en materia de asistencia sanitaria, biotecnología y productos farmacéuticos, el bloqueo es una pesadilla diaria para la mayoría de los 11,3 millones de habitantes de la mayor isla-nación del Caribe, indicó.
Parece, a la vista de la última votación de Estados Unidos en las Naciones Unidas, que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aún no está interesado en cumplir su promesa de derribar el cruel muro, subrayó la publicación.
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