Quien fuera representante de la nación caribeña ante la Organización de las Naciones Unidas y ministro de Relaciones Exteriores enfatizó en la manipulación del tema por parte del gobierno norteamericano.
‘Desde los inicios de Cuba como nación, un elemento fundamental eran los cubanos que no residían en la isla, y hay toda una historia de emigración desde suelo caribeño y hacia el norte antes de 1959, dijo Alarcón según el sitio Cubaperiodistas.
Recordó cómo por el puerto de La Habana, entre febrero y septiembre de 1869, salieron para Nueva York 100 mil personas, de una población de un millón de habitantes.
‘Ha habido otros éxodos masivos, pero ninguno se compara con aquel’, señaló.
Tras el triunfo de la Revolución liderada por Fidel Castro, el 1 de enero de 1959, hubo un puente aéreo entre ambos países por donde se fueron esbirros de la dictadura de Fulgencio Batista (1952-1959), y en 1966 Washington aprobó la Ley de Ajuste Cubano, que desde entonces otorga privilegios especiales a los migrantes de la isla, recordó.
En la actualidad, la situación es más complicada, pues la administración de Donald Trump (2017-2021) de un golpetazo acabó con avances del anterior presidente Barack Obama, los cuales facilitaron los vínculos de Cuba con su emigración.
Alarcón fue uno de los gestores del primer diálogo entre el gobierno revolucionario y un grupo representativo de la comunidad cubana en los Estados Unidos, en 1978, y ello desencadenó otros proyectos en común.
El político valoró al intercambio como ‘muy civilizado, relajado’, y ‘para ellos era un desafío’, pues ‘lo que estaban haciendo era contrario a los intereses y la postura del gobierno norteamericano’, destacó la fuente.
Además, el entrevistado refirió ‘la diferencia enorme entre el hecho de que para Estados Unidos, Cuba es un tema de menor importancia; mientras para La Habana, Washington es el gran tema’.
Los vínculos también están marcados por la vigencia de leyes como la Helms-Burton, que promueve la injerencia en los asuntos internos aquí, y el incumplimiento del compromiso de la Casa Blanca de garantizar un mínimo de 20 mil visas por año a quienes deciden establecerse en el vecino país, de acuerdo con fuentes oficiales.
Recientemente la cancillería de Cuba recordó sus esfuerzos por garantizar un flujo migratorio regular, ordenado y seguro frente a las medidas de la administración estadounidense, que impiden ese tipo de tránsito, en tanto incentivan a los cubanos a salidas ilegales y a poner en riesgo sus vidas.
msm/cgc