Cuando apenas quedan dos meses para que la jefa de gobierno abandone el poder tras 16 años de gestión, los contagios con el virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad, aumentan y las previsiones meteorológicas auguran nuevos eventos cataclísmicos en los próximos días.
Cada semana es más exigente; estamos en una situación en la cual las infecciones crecen, respondió Merkel ante preguntas de los periodistas.
Más tarde calificó de ‘tremendas’ las inundaciones en Renania-Palatinado y Renania del Norte-Westfalia con saldo cercano a los 200 fallecidos y miles de desaparecidos.
Trabajaré hasta el último día como siempre lo he hecho; hay poco tiempo para pensar en lo que vendrá, sentenció la jefa de gobierno.
Sobre el crecimiento exponencial de las infecciones con el SARS-CoV-2, apeló a mantener las medidas de precaución y acelerar la vacunación.
Los test ayudan a controlar la pandemia pero sabemos que la única forma de superarla es la inmunización, sentenció.
Más tarde reflexionó acerca de crisis climática a nivel global y refirió que su país ‘sólo’ es responsable del dos por ciento de las emanaciones contaminantes en el orbe.
En ese sentido llamó a implementar estrategias que permitan prevenir y enfrentar con éxito eventos climáticos como los acontecidos días atrás en el país y que vinculó con la contaminación atmosférica.
La canciller federal confirmó que Alemania ostenta los niveles de desempleo juvenil más bajos de Europa, cifra que descendió de cinco a tres millones durante sus 16 años de mandato, según datos oficiales.
Merkel emergió en el escenario político alemán en 1994 cuando fue ministra de Medio Ambiente en el gabinete de Helmut Kohl.
Al frente del ejecutivo federal apoyó la lucha contra el cambio climático y elevó del 10 al 40 por ciento el uso de las energías renovables.
Otros temas como el migratorio no fueron abordados ante la prensa por la jefa de gobierno a pesar de constituir una tarea pendiente, no solo para Alemania sino de toda Europa.
Organizaciones no gubernamentales, de derechos humanos, así como organismos internacionales reclaman a las autoridades regionales políticas efectivas ante este fenómeno que afecta a millones de personas.
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