En reunión en esta ciudad de los titulares de Defensa de los países miembros de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), Shoigú denunció que las nuevas bases estadounidenses se convertirán en una amenaza para la estabilidad de la región.
Advirtió que la apresurada retirada de los contingentes extranjeros de Afganistán provocó un aumento adicional de las tensiones políticas y militares y un incremento de las hostilidades en la zona, indicó la agencia de noticias TASS.
Según el ministro, los estadounidenses están más preocupados ‘por la posibilidad de establecer nuevas rutas de tránsito e instalaciones logísticas en los Estados de Asia Central y desplegar sus bases militares’, comentó.
Aseguró que Moscú está al tanto de esos planes que, en su opinión, no conducirán a nada bueno, sino que solo contribuirán con el aumento de la presencia de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en la región y al aumento de la inestabilidad.
En tal sentido, subrayó la importancia de que miembros de la OCS mantengan consultas constantes sobre el conflicto afgano para evitar que los procesos desestabilizadores se extiendan a sus territorios.
Shoigú alertó que la situación en ese país se deteriora con rapidez, está prácticamente fuera del control de sus autoridades y que los talibanes controlan la mayor parte de su territorio en estos momentos, lo cual constituye una amenaza para los países vecinos, dijo.
‘Los acontecimientos en las zonas fronterizas del norte del país y el éxodo masivo de afganos a Tayikistán y Uzbekistán demuestran que los acuerdos entre Estados Unidos y el movimiento Talibán no se están cumpliendo’, aseveró.
El ministro ruso de Defensa indicó que resulta alarmante el creciente refuerzo de las posiciones del Estado Islámico y de otras organizaciones terroristas internacionales en Afganistán.
mem/mml
