El plan del Ministerio de Agricultura y del Consejo Salvadoreño del Café es distribuir esta plantación en las seis cordilleras cafetaleras para mejorar sus agroecosistemas y conservar los recursos naturales.
Estas iniciativas responden al Plan de Transformación y Despegue Sostenible del Café, un producto que llegó a ser considerado el ‘grano de oro’ de El Salvador, y que sucumbió a plagas, intermediarios y abandono.
La idea es inyectar recursos, tecnología y asistencia técnica de primer nivel, para mejorar las condiciones en las zonas rurales del país, afectadas además por situaciones de inseguridad para los recolectores de café.
Entre las acciones recientes destacan el suministro de 400 mil plantas en beneficio de 225 pequeños y medianos productores en el occidental departamento de Santa Ana.
Las autoridades del Ministerio garantizaron que estas posturas están libres de hongos, plagas y parásitos, y son resistentes al cambio climático, para evitar erosión y afectaciones a las cuencas hidrográficas.
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