Ricardo Salazar, director de la Defensoría, aseguró que la institución detectó incrementos de hasta el 34 por ciento en los precios de determinados productos cuyo uso es obligatorio en la actual emergencia sanitaria.
Salazar denunció la persistencia de la especulación, acentuada tras la entrada en vigor el pasado 1 de agosto del aumento del salario mínimo.
‘Las mascarillas KN-95 subieron de precio de manera injustificada en un día en la zona oriental, y la Defensoría del Consumidor aplicará la ley a quienes actúan de esta manera’, advirtió el funcionario.
También denunció el incremento en 25 centavos de dólar del garrafón de agua por parte de ciertos distribuidores, lo cual podría acarrear multas de hasta 500 salarios mínimos (unos 150 mil dólares).
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