La afirmación corresponde a Dolores Corujo, presidente del Cabildo, de cierta forma en respuesta a lo dicho hace años por el Premio Nobel de Literatura: ‘Lanzarote no es mi tierra, pero es tierra mía’.
Una jornada de grandes emociones al evocar la trayectoria y obra del notable escritor lusitano (1922-2010) en su casa de Tías, Lanzarote, donde vivió gran parte de su vida al lado de Pilar del Río, su viuda ahora presente en los homenajes.
Presidente de la Fundación Saramago, recitó un poema escrito 30 años antes de que se mudara a Lanzarote, ‘Una isla apenas habitada’, con versos que según confesó Pilar, señalaban al portugués destinado a vivir en pedazo del Atlántico.
Significa tanto para Portugal como para España y por eso es bueno recordar cuando el autor de Ensayo sobre la ceguera decía que ‘si prestamos atención a las cosas pequeñas, acabaremos entendiendo las grandes’, señaló su entrañable compañera de la vida.
Recitales, conciertos, publicaciones, exposiciones, y muy en especial, la reivindicación de la cultura, ‘esa cultura que ayudó a tantos durante los meses de confinamiento y que ahora necesita que la sociedad no la relegue de nuevo’, apuntó.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, aprovechó su estancia de vacaciones en Canarias para tomar parte en el lanzamiento de las jornadas de tributo a Saramago, en la biblioteca de la casa del escritor.
Sánchez resaltó al hombre que hizo ‘una casa hecha de libros’ como referente e inspiración para las sociedades que necesitan afrontar retos en el momento actual.
Era un hombre impaciente por llegar a ver
una sociedad construida sobre fundamentos profundamente humanos, comentó
‘Estoy convencido de que entre todos estamos dando pasos decisivos para hacer un poco más cierto aquel mundo de justicia, igualdad y progreso real que él soñaba y reclamaba’, reflexionó el gobernante.
mem/ft