Según explicó en su cuenta oficial de Twitter el director general en la cancillería de Asuntos Consulares y Atención a Cubanos Residentes en el Exterior, Ernesto Soberón, el único causante de los obstáculos para el envío de fondos es el propio Gobierno norteamericano.
Al respecto, precisó que Washington limita los montos e impide los canales legales y seguros para las remesas, donaciones y transferencias bancarias a la isla.
Recientemente autoridades del país ratificaron la voluntad de promover oportunidades para que sus nacionales residentes en el exterior puedan aportar al desarrollo de la nación, pero reconocieron que obstáculos como el bloqueo impuesto por la Casa Blanca desde hace casi seis décadas impiden las inversiones.
Soberón denunció la manipulación del tema y calificó de absurdo al discurso que pretende acusar a Cuba con dicha cuestión y decir que la limitación de las remesas se debe a que el Gobierno antillano se queda con ellas o con una parte.
Al final, la permanencia de las medidas coercitivas de Washington solo busca crear dificultades, malestar social y el descontento de las personas, remarcó el funcionario.
El pasado 22 de julio, en conferencia de prensa, el canciller Bruno Rodríguez dijo que Estados Unidos secuestra las remesas que envían cubanoamericanos a sus familiares aquí y que la Casa Blanca utiliza ese sensible tema como un arma política contra la población de la nación caribeña.
De acuerdo con el jefe de la diplomacia cubana, sucesivas decisiones de la administración de Donald Trump (2017-2021) cercenaron el flujo de las transferencias hasta prohibirlas mediante medidas gubernamentales.
Añadió que la compañía Western Union, encargada de tramitarlas, cobraba cerca de cinco dólares por cada 100 enviados, mientras la empresa contraparte cubana recibía una comisión de solo un dólar.
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