La medida anunciada por Giammattei el pasado viernes, tras un Consejo de Ministros de urgencia por el alza de contagios Covid-19, llegó al Legislativo el martes y un día después inició su examen con el rechazo declarado de varios partidos de oposición e incluso de bancadas seguidoras del oficialismo.
El propio miércoles la jornada fue tensa, pues transcurrió entre gritos, desorden y arrebatos de micrófono al parlamentario que leía el texto ante la negativa de la junta directiva de darle la palabra a varios diputados opositores que insistían en calificarlo como una acción tardía por parte del Gobierno para atender la emergencia sanitaria.
La víspera disminuyeron las tensiones, la sesión abrió luego de cuatro horas de espera, pero fue imposible el examen del documento en su segunda lectura por falta de quórum y el presidente del Congreso, Allan Rodríguez, se vio obligado a levantar la plenaria y convocar para este viernes.
El guion tuvo su segunda parte y el estancamiento fue más visible, al no llegar la Junta Directiva al consenso necesario para cumplir con las tres lecturas obligatorias y aprobación final o modificación como establece la ley en caso de no pasar de urgencia nacional como ahora.
Esos 107 votos fueron esquivos desde un principio, y hoy los diputados no conocieron el texto, pues la espera duró dos horas y 35 minutos para poder abrir la sesión con 68 diputados presentes y 52 minutos más tarde se levantó por la misma causa.
En declaraciones a la prensa, Rodríguez se limitó a decir que el Congreso ‘ha cumplido con su deber’ de poner en conocimiento el Decreto Gubernativo 06-2021 y lamentó que los diputados no expresaran sus opiniones en el Hemiciclo, en clara referencia a los partidos de oposición que le negaron su voto y criticaron abiertamente su contenido.
Agregó que solamente se conoció en primera lectura -incluso esta también cuestionada-, y ratificó que se limitaron a cumplir con los plazos, sin reconocer la derrota.
El decreto gubernamental consta de 15 artículos y cobró vigencia por 30 días el pasado sábado con su publicación en el Diario de Centroamérica, sin embargo, la Constitución establece que este debe ser aprobado, modificado o improbado por el Congreso en el plazo de tres días.
La polémica vuelve a aparecer ahora, pues mientras algunos expertos señalan que el Estado de Calamidad caducó, la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia aseguró que este no pierde vigencia porque el Congreso no lo improbó ni modificó.
‘No existe ninguna norma jurídica que establezca que después de los tres días no tendrá validez el Decreto Gubernativo (principio de legalidad); la norma se emitió y se publicó en el Diario Oficial, así que seguirá vigente. Corresponde al pleno del Congreso de la República decidir sobre la misma’, expusieron.
De lo que no hay dudas es del fallido intento del Ejecutivo de conseguir un nuevo voto de confianza, a pesar de que Giammattei se los pidiera públicamente en cadena nacional.
Ni con cifras récords de más de cinco mil contagios diarios, convencieron esta vez los artículos para contener el repunte, sobre todo, un polémico toque de queda en horas mayoritariamente de la madrugada, recordaron analistas.
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