Praga puso en práctica tal decisión en consonancia con similar medida aplicada en los últimos días por otros miembros de la Unión Europea, en respuesta a la llegada al poder y la toma de Kabul por el referido movimiento armado.
De esa forma, se congeló la entrega de un millón y medio de euros, confirmó la vocera del ministerio de Relaciones Exteriores, Mariana Wernerová, citada por Radio Praga Internacional.
Tal respaldo financiero fue aprobado aquí en julio pasado y correspondía a los compromisos de este país con Afganistán de entre 2018 y 2020.
La intención era extender la citada ayuda hasta 2024, de acuerdo con fuentes de la Cancillería, citadas por el mencionado medio.
Tras 20 años de ocupación y acciones bélicas de Estados Unidos contra Afganistán, el movimiento Talibán recuperó el poder, en medio de una inconclusa retirada de tropas norteamericanas, así como de un caos y crisis humanitaria, en especial en Kabul.
Desde octubre de 2001, las fuerzas estadounidenses causaron la muerte de al menos 30 mil civiles afganos, hirieron a más de 60 mil y convirtieron en refugiados a 11 de los 38 millones de habitantes del empobrecido país asiático.
La aviación norteamericana, solo en 2019, realizó seis mil 825 ataques con drones y lanzó siete mil 423 bombas, a razón de 20 piezas por día, denunció RIA Novosti, citada por la prensa local.
Chequia envió en su momento más de 300 soldados a Afganistán con el anunciado propósito de combatir el terrorismo.
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