Según Johnson, cuyo país ocupa la presidencia temporal del bloque formado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, es vital que la comunidad internacional trabaje unida en garantizar la evacuación de los extranjeros y los colaboradores afganos.
También llamó a evitar una crisis humanitaria y ayudar a preservar ‘los logros alcanzados’ durante los 20 años que duró la ocupación del país surasiático por tropas internacionales lideradas por Estados Unidos en nombre de la guerra contra el terrorismo.
El movimiento Talibán, que nunca fue derrotados totalmente, comenzó a recuperar terreno tras el inicio de la retirada de la coalición el año pasado, y hace una semana recuperó el control del país.
La salida de los militares fue pactada por el entonces mandatario republicano Donald Trump y los insurgentes en una reunión que tuvo lugar en Doha, Qatar, en 2020, y luego fue respaldada por su sucesor demócrata Joe Biden.
Johnson, a quien la oposición y no pocos de sus seguidores acusan de abandonar a su suerte a miles de afganos que colaboraron con las tropas británicas, apuntó esta semana que el Reino Unido fue a Afganistán para apoyar a Estados Unidos, por lo que era impensable, dijo, permanecer allí una vez que Washington decidió retirar a sus militares.
Tras la debacle, el gobierno británico anunció su disposición a acoger hasta 20 mil refugiados afganos en los próximos cinco años, una cifra que muchos consideran insuficiente.
Hasta el momento, más de dos mil personas, entre personal diplomático británico y colaboradores afganos, fueron evacuados en aviones de la Real Fuerza Aérea del Reino Unido, en medio de reportes de caos en el aeropuerto de Kabul.
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