En declaraciones a periodistas tras presidir una reunión de su gabinete de crisis, el gobernante calificó de ‘bárbaro’ el doble ataque suicida, y aseveró que los militares británicos y el personal de la cancillería y del ministerio del Interior seguirán trabajando hasta el último momento.
Según reportes, los atentados ocurridos este jueves en las afueras del aeropuerto de Kabul en momento en que miles de personas intentan abandonar el país tras la toma del poder por el movimiento Talibán, dejaron un número todavía indeterminado de muertos, entre ellos varios soldados estadounidenses, y decenas de heridos.
La oficina de prensa del ministerio británico de Defensa aseguró, sin embargo, que los militares y miembros del gobierno del Reino Unido desplegados en Afganistán resultaron ilesos.
Las fuerzas británicas están trabajando de forma estrecha con nuestros aliados para brindar seguridad y asistencia médica, agregó.
El movimiento Talibán, nunca derrotado totalmente durante los 20 años que duró la ocupación extranjera, comenzó a recuperar terreno en Afganistán el año pasado, tras el inicio de la retirada de la coalición liderada por Estados Unidos el año pasado.
Finalmente el 15 de agosto entró en Kabul sin encontrar resistencia de las fuerzas armadas del ya expresidente Ashraf Ghani, quien huyó a los Emiratos Árabes Unidos.
La caída de Kabul en manos del grupo extremista afgano hizo que miles de personas, la mayoría colaboradores de las fuerzas de ocupación, acudieran en masa al aeropuerto capitalino con la esperanza de ser evacuados junto al personal extranjero antes de que expire el plazo para la salida de las tropas estadounidenses el 31 de agosto.
jcm/nm