Al menos 13 soldados estadounidenses también murieron en las detonaciones del jueves, la peor pérdida en un solo día para las tropas norteamericanas de ocupación en Afganistán desde el ataque de agosto de 2011 a un helicóptero Chinook que mató a 30 militares, indicó la cadena Al Jazeera.
Los talibanes dijeron que 28 de sus miembros perecieron igualmente en las explosiones ocurridas durante la noche en las afueras del aerodromo capitalino, donde miles de personas buscan salir del país tras la toma del poder por los fundamentalistas radicales.
El atentado realizado por terroristas suicidas fue reivindicado por la rama de ISIL del Estado Islámico (ISIS) en Afganistán, en la provincia de Khorasán.
na de las explosiones tuvo lugar frente a Abbey Gate, una de las puertas de acceso a las instalaciones y otra en el Hotel Baron o cerca de él, que se encuentra a poca distancia. Las detonaciones fueron seguidas de un tiroteo.
Estados Unidos y los países de la OTAN instaron a la gente con intención de abandonar el país a alejarse del aerodromo capitalino debido a la inminencia del ataque.
Las tropas occidentales se apresuran en evacuar al mayor número posible de personas antes de la fecha tope del 31 de agosto.
En los días transcurridos desde que los insurgentes talibanes arribaron a Kabul, Estados Unidos y sus aliados evacuaron ya a 100 mil personas de Afganistán.
La nación centroasiática tiene enormes desafíos luego de 20 años de ocupación militar por el Pentágono y aliados de la OTAN, en supuesta cruzada antiterrorista y su posterior reconquista por el movimiento Talibán.
La guerra costó miles de millones de dólares al contribuyente estadounidense y casi tres mil bajas de soldados norteamericanos y numerosos heridos, así como la vida de 250 mil civiles afganos, mientras 11 millones de personas buscaron refugio fuera del país.
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