Una serie de hechos favorables, aunque no definitivos, alientan a las autoridades españolas a reducir las medidas mantenidas durante la pandemia, como el levantamiento del uso de la mascarilla en espacios abiertos.
Para mediados de la próxima semana, la nación ibérica espera haber completado la doble dosis de vacunación en el 70 por ciento de la población (47,5 millones de habitantes).
En las estadísticas actualizadas de la vacunación se superaron los 32 millones de ciudadanos con pauta completa, lo que significa que casi el 68 por ciento del país tiene esa condición.
La mayoría de los dobles pinchazos han sido en los dos últimos meses con Pfizer/Biontech y Moderna; cierta cantidad de AstraZeneca y en menor proporción la dosis única de Janssen, las aprobadas en España.
Los estadios de fútbol vieron el regreso del público de forma limitada y como máximo en un 35 por ciento. Sin embargo, la baja en los contagios hace más presión en las autoridades para ampliar los aforos.
También se abrirá a la entrada de aficionados los torneos de la Liga de Baloncesto, un evento que tiene el detalle de celebrarse a puertas cerradas, así que los reglamentos con los hinchas serán diferenciados.
Para evitar futuras improvisaciones la nación ibérica ya reservó medio millón de vacunas francesas Sanofi/GSK para enero de 2022, ante la certeza que será esta la otra vacuna europea aprobada en el continente.
Al mismo tiempo, las autoridades destacaron que el país está preparado para administrar una tercera dosis de la vacuna contra la Covid-19, a la espera del pronunciamiento de los expertos de la Agencia Europea de Medicamento. Además, se mantienen las expectativas ante el comienzo de los ensayos clínicos de la vacuna PHH-1V contra la Covid-19, el primero en personas en España.
El candidato español a vacuna está basado en dos proteínas recombinantes (plataforma similar a la de Novavax y Sanifi), capaces de generar una respuesta inmunológica frente a una de las proteínas del SARS-CoV-2, el virus que provoca la Covid-19.
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