La obra conjunta de la compañía energética rusa Gazprom y cinco socios europeos, está compuesta por dos tuberías con una capacidad de 55 mil millones de metros cúbicos de gas natural por año, que viajan desde la costa de Rusia a través del mar Báltico hasta Alemania.
Está previsto poner en servicio el gasoducto para fines de año, indicó el mensaje de la empresa. Indicó que antes debe enlazarse el tramo de la costa alemana con el extendido desde las aguas de Dinamarca.
Apuntó que luego se realizarán las obras de puesta en marcha del segundo tramo para poner el gasoducto en explotación antes que concluya 2021.
Estas obras fueron suspendidas en diciembre de 2019 luego que la empresa Allseas, con sede en Suiza, abandonara el contrato de colocación de las líneas a causa de las amenazas de Estados Unidos. A partir de diciembre de 2020 fue reanudada su construcción.
Con Nord Stream 2, las empresas estadounidenses perderán un mercado potencial para su gas natural licuado proveniente de los yacimientos de esquisto. También rechazó el proyecto Ucrania, preocupada por perder las ganancias del traslado del combustible ruso a través de su territorio.
En días recientes, Washington y Berlín firmaron un acuerdo según el cual la Casa Blanca dejará de obstaculizar la puesta en marcha del gasoducto bajo el compromiso alemán de usar su influencia para persuadir a Moscú de extender el tránsito de gas por Ucrania, que expirará a fines de 2024.
Otro punto del documento apunta que Estados Unidos podría imponer sanciones a Rusia en el supuesto caso de que utilice la energía como arma política en contra de Kiev.
En varias ocasiones, las autoridades rusas instaron a los enemigos de Nord Stream 2 a dejar de politizar el proyecto, el cual consideran trascendental para la seguridad energética de la Unión Europea.
ga/mml