El mandatario intervino por videoconferencia en la reunión conjunta de los jefes de Estado y de Gobierno de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) y la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), efectuada este viernes en Dusambé, la capital tayika. ‘Esto es algo obvio, son directamente responsables de las graves consecuencias de su larga presencia en ese país’, dijo Putin, refiriéndose a la necesidad de que esas naciones apoyen a la nación islámica.
Manifestó además que Moscú comparte la intención de convocar una conferencia internacional de donantes para brindarle asistencia humanitaria y económica a Afganistán, bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El jefe de Estado ruso reconoció que por sus intervenciones en la reunión, todos los Estados miembros de la OTSC y de la OCS comparten enfoques sobre la manera en que se debe actuar ante la situación en ese país islámico.
Opinó que la mejor opción para construir un diálogo y lograr acuerdos con el nuevo Gobierno de Kabul, formado por el movimiento Talibán, es a través de la troika ampliada de mediadores (Rusia, China, Pakistán y Estados Unidos) y manifestó que el trabajo en esa dirección ya está en marcha.
Putin alertó que la falta de fondos en el tesoro nacional del país podría empujar a sus nuevas autoridades al tráfico de drogas y armas. También manifestó su preocupación por un posible éxodo de millones de personas provocado por la desesperación.
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