El magistrado neoyorquino apuntó que buscaría una fecha para el juicio a finales de agosto o principios de septiembre. Sin embargo, ese calendario podría cambiar, como ocurre con frecuencia en los tribunales.
El proceso contra Weisselberg y la Organización Trump de la familia del expresidente Donald Trump podría coincidir con el periodo previo a las elecciones de mitad de mandato de 2022, según análisis de medios de prensa.
Esta coincidencia podría resultar negativa para el exmandatario quien aún insiste en que le robaron las elecciones de 2020 y estudia la posibilidad de volver como el principal candidato del Partido Republicano.
Según el diario The New York Times el magistrado de la corte penal de Manhattan estableció el calendario el lunes durante una comparecencia en ese foro para la Organización Trump y Weisselberg.
‘Tenemos fuertes razones para creer que podría haber otras acusaciones’, dijo Bryan Skarlatos, un abogado de Weisselberg, quien fue acusado de evadir impuestos sobre más de 1,7 millones de dólares en prebendas que, según los fiscales, deberían haber sido declaradas como ingresos.
Otros empleados del grupo empresarial también son investigados por recibir regalías igualmente no declaradas, como apartamentos gratuitos y coches alquilados.
El Times señaló que si el calendario sigue su curso, el juicio podría iniciarse en las últimas semanas de una turbulenta temporada política y seguir haciendo sombra a Trump, que sugiere repetidamente que podría volver a presentarse a la presidencia.
Además tendría lugar después de que Cyrus R. Vance Jr, el fiscal del distrito de Manhattan que investigó los negocios familiares del expresidente durante años, haya dejado su cargo.
El Times valoró que el proceso legal podría complicar la confianza de los candidatos republicanos en el atractivo del expresidente, y animar a sus oponentes demócratas a convertir las carreras competitivas en un referéndum sobre este, como hizo con éxito el gobernador de California, Gavin Newsom, en las elecciones revocatorias de la semana pasada.
Durante su comparecencia ante la corte en julio Weisselberg fue acusado de fraude fiscal, hurto mayor y otros delitos y la Organización Trump también lo fue por facilitar lo que los fiscales describieron como una trama de 15 años para evadir impuestos.
Pese a que se declaró inocente de los cargos, el funcionario fue apartado de los cargos de dirección de la empresa y los fiscales presionan para que coopere con su investigación más amplia sobre los negocios del expresidente.
Si el directivo es condenado podría enfrentarse a más de una década de prisión y ya no podrá recibir el perdón de su jefe.
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