‘Tomaremos poco a poco el transporte del canal de Suez, especialmente porque es más largo’, indicó el funcionario en entrevista para el canal de televisión Rusia 24.
Señaló que se podrá hablar de competencia real con esa zona de tráfico marítimo del Medio Oriente solo cuando la navegación transcurra durante todo el año y sea segura de forma absoluta, provista en cualquier parte del recorrido de servicios de rescate, comunicación e Internet.
El Ministerio de Desarrollo del Lejano Oriente de Rusia y la corporación estatal Rosatom presentaron un proyecto de transportación regular a través de esa vía usando el buque de carga nuclear Sevmorput.
Según el titular de esa cartera, Alexéi Chekunkov, el Gobierno prevé que esa nave recorra ese itinerario tres veces al año con regreso al punto de partida a partir de 2022.
Trútnev explicó que en estos momentos trabajan en la ruta cinco rompehielos rusos y hasta 2026 se construirán otros cuatro y se diseña una propuesta para el funcionamiento de estos buques con gas natural licuado como combustible.
Debido a la congelación de las aguas, hasta ahora ha resultado imposible la navegación durante todo el año a través de esa vía, que es la principal ruta navegable ártica de Rusia y el camino más corto entre el Lejano Oriente y la parte europea del país.
Son cinco mil 600 kilómetros de extensión a lo largo de los mares que forman parte del océano Ártico (Barents, Kara, Láptev, Siberia Oriental, Chukotka y Bering). Une los puertos europeos, los del Lejano Oriente de Rusia y los ríos siberianos en un único sistema de transporte.
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