En la planificación nacional y territorial tiene que existir integralidad y complementariedad entre los actores económicos involucrados, explicó a Prensa Latina la directora territorial del Ministerio de Economía y Planificación, Aizel Llanes.
Pero, además, un apoyo sinérgico y participativo en su ejecución, seguimiento y evaluación, añadió la también coordinadora nacional de la Plataforma Articulada del Desarrollo Integral Territorial.
Por ejemplo, dijo, la planificación física y el desarrollo territorial deben observarse en su conjunto pues constituyen las bases del plan del ordenamiento y evalúan de manera integral los temas espaciales.
Ellos definen las potencialidades y limitaciones del municipio, ya sea sectores prioritarios, los suelos, medioambiente o temas energéticos, indicó.
No puede existir, añadió, una definición de programa y a la vez desconocer donde existen las fortalezas y debilidades, pues puede conllevar a inversiones y financiamientos estériles.
Al final no darán rendimientos, y sin ellos no tenemos desarrollo, remarcó.
Llanes resaltó que la descentralización de las competencias es esencial porque en ocasiones los municipios tienen responsabilidades para la implementación de determinadas políticas nacionales pero no cuentan con niveles de decisión sobre esos temas, y ello resta efectividad y eficacia en los procesos, explicó.
Donde se encuentran los problemas, significó, tienen que existir las facultades para la adopción de decisiones, los recursos y gestionar la mayoría de las actividades a nivel territorial.
Actualmente, se construye un índice de desarrollo con dimensiones económicas, sociales, medioambientales e indicadores que muestran donde se localizan las brechas de calidad de vida de la población.
Pretendemos evaluar aquello que realmente impacta en la comunidades, es decir, que la estrategia de desarrollo municipal responda a los problemas actuales de las localidades.
Pero para gestionar el desarrollo local territorial se requiere de financiamientos, estos pueden ser por inversión, crédito, cooperación internacional, fondos propios o destinados a proyectos de desarrollo local.
Si tenemos un serie de proyectos que van a generar ingresos y son económico-productivos, entonces pueden utilizar una cuenta de fideicomiso -propiedad del consejo de administración municipal- con condiciones ventajosas de intereses de un cuatro por ciento.
Eso es un beneficio para quienes se incorporen en los proyectos de desarrollo local, y además, un financiamiento que retorna a diferencia de aquellos empleados en fondos perdidos.
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