Durante su intervención ante el Consejo de Seguridad, el titular señaló que el liderazgo de ellas debería ser la norma pues no es posible excluir a la mitad de la humanidad de los asuntos internacionales.
‘En sus manos: las mujeres se apropian de la paz’, expresó el diplomático portugués y enfatizó en la necesidad de abordar plenamente los desafíos y las brechas que continúan impidiendo que tengan la misma voz.
Ellas son constructuras de paz, hacedoras de cambios, participan en la mediación y negociación con grupos armados, en la implementación de los acuerdos de paz y otros proceso políticos, y luchan por sus derechos y la cohesión social en sus comunidades, recalcó Guterres.
Pero se han visto muy afectadas por los conflictos y la violencia en todo el mundo, además de por la pandemia de Covid-19, agregó.
Al respecto, pidió a los miembros del Consejo de Seguridad que apoyen el trabajo de la ONU para fortalecer las alianzas con las líderes locales, defensoras y activistas de los derechos humanos y para promover a las mujeres en su totalidad en función de una participación igualitaria.
Guterres citó tasas crecientes de violencia y misoginia y subrayó la infrarrepresentación extrema de mujeres en puestos de toma de decisiones.
El desequilibrio de poder entre hombres y mujeres continúa siendo ‘la más obstinada y persistente de todas las desigualdades’, apuntó.
Los miembros del Consejo también analizar los aspectos contenidos en la histórica resolución 1325 sobre Mujeres, Paz y Seguridad, adoptada en el año 2000, la cual dio mayor visibilidad a este tema dentro del organismo multilateral.
Asimismo, ese documento incluyó la perspectiva de género en situaciones de vulnerabilidad humanitaria, estableciendo la Agenda ‘Mujeres, Paz y Seguridad’.
Según reportes de Naciones Unidas, los efectos de la pandemia de Covid-19 han impactado de forma negativa en los objetivos de igualdad de género, y con especial fuerza en la población femenina que vive en áreas afectadas por conflictos.
Además, ellas siguen subrepresentadas en la toma de decisiones sobre la respuesta a la crisis sanitaria y son más afectadas por el desempleo, la pobreza y la violencia de género durante los encierros a raíz de la pandemia.
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