La llegada de noviembre trajo el aumento del cilindro de 25 libras -el de mayor consumo- de 132 quetzales a 142 (de 17 a casi 18,50 dólares al cambio actual) y el de 35 libras subió 14 quetzales más, equivalente 1,81 dólares.
En las tres prestaciones, recordaron expertos, el crecimiento fue del 43 por ciento, pues la libra antes estaba en 3,96 quetzales y ahora cuesta 5,68 (0,50 a 0,73 centavos de dólar)
De acuerdo con Fernando Trabani, defensor del Consumidor de la Procuraduría de Derechos Humanos, estos saltos causan un impacto en el bolsillo de las familias y en actividades como la elaboración de alimentos, tortillas y pan, productos básicos en la dieta de la población.
¡Sube nuevamente el gas! y Precios para morirse fueron algunos de los titulares de los periódicos al dar a conocer la medida con la aclaración de que la última subida fue el 17 de septiembre.
Hasta ahora, precisó Trabani, el incremento lo aplica una sola compañía envasadora, aunque al agotar el inventario otras empresas lo replicarán, advirtió.
Por su parte, familias emprendedoras coincidieron en que les está costando bastante sostener pequeños negocios como el de panaderías, pues las harinas y grasas también subirán precios.
Autoridades del Ministerio de Economía atribuyen el alza del gas y de la gasolina a los vaivenes de los precios del petróleo en el mercado internacional, pero llega en meses de fin de año, cuando el consumo en los hogares se dispara por las fiestas navideñas.
A partir de ayer, también rige un nuevo pliego tarifario eléctrico, del 1,9 al 2,5 por ciento, según la información publicada por la Comisión Nacional del sector.
En las tres empresas suministradoras, el salto es entre tres y cinco quetzales (entre 0,39 y 0,65 centavos de dólar) en el caso de las tarifas sociales, siempre las más económicas, y el rango es similar para los demás consumidores.
Se suma al trío de gastos, sucesivos cambios en el precio de la gasolina desde hace varios meses, lo que obliga a muchos guatemaltecos a parar sus vehículos entre semana porque se hace insostenible seguir la actual escalada.
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