El líder de la rebelde Unión de las Fuerzas de Resistencia (UFR), Tomani Erdimi, expresó a través de un comunicado que ese ente, conformado por una alianza de numerosas formaciones, se adhiere al llamado del Ejecutivo transitorio, encabezado por Mahamat Idriss Déby Itno, quien aboga por la paz.
Según el documento, las UFR pusieron como condiciones para sentarse a la mesa de diálogo con el gobierno, partidos políticos y otras organizaciones, la realización de una amnistía para la liberación de los presos políticos y de guerra, así como la devolución de bienes incautados a insurgentes.
Por su parte, el denominado Frente para el Cambio y la Concordia en Chad (Fact) pidió al actual Jefe del Ejecutivo no ejercer la violencia contra las manifestaciones pacíficas y dejar en libertad a los prisioneros de guerra, entre otras demandas.
La inestabilidad social y política aumentó en Chad a raíz de la muerte violenta por combatientes del Fact el pasado 19 de abril del presidente, Idriss Déby Itno.
El mandatario falleció tras recibir heridas de bala mientras supervisaba en el norte del país a las tropas gubernamentales que combatían a tales insurgentes.
Tras el deceso del mandatario Déby, en este territorio accedió el poder el gobernante Consejo Militar de Transición (CMT) al que se oponen organizaciones cívicas, las cuales demandan mediante protestas el retorno de un gobierno civil.
El estado de Chad vive sumido en una crisis política y social en medio de enfrentamientos del Ejército contra agrupaciones rebeldes en el oeste del país y ataques también de entes radicales islámicos como Boko Haram.
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