Este es el segundo año consecutivo que quedan prohibidas las peregrinaciones hasta el santuario, ubicado en el nororiente de esta capital.
La medida forma parte del protocolo de bioseguridad aplicado por el Comité de Operaciones de Emergencia Nacional para evitar un repunte de contagios por Covid-19, teniendo en cuenta la multitud que se une en las largas caminatas y posterior ingreso a la iglesia.
De acuerdo con la tradición, cientos de personas realizan una peregrinación por las calles de Quito durante más de 10 horas como un acto de fe y agradecimiento a la virgen por las bendiciones recibidas durante al año y para realizar nuevas peticiones.
En rueda de prensa, ambas partes señalaron que las puertas del santuario permanecerán cerradas y los eventos serán transmitidos por redes sociales y canales de televisión y emisoras de radio a nivel nacional.
Al respecto, Javier Piarpuzán, párroco de la basílica del Quinche, recalcó el llamado a los feligreses para no realizar las caminatas, pues habrá otras oportunidades y fechas.
Por su parte, desde la Policía alertaron que habrá controles reforzados en los tres accesos al Quinche, de los cuales estarán a cargo agentes del orden y personal de la Agencia Nacional de Tránsito.
Las acciones contarán con el apoyo de 34 cámaras de videovigilancia del Sistema Integrado de Seguridad ECU 911, acotó al respecto el presidente de esa institución, Juan Zapata.
El cronograma por las romerías de la Virgen del Quinche incluye actividades durante los próximos 12 y 13, así como 20 y 21 de noviembre.
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