No rechazarla y denunciarla abiertamente, con los respectivos nombres y apellidos, es criminal y anticubano, enfatizó el colectivo en un comunicado.
Advirtió a los enemigos del pueblo cubano que “no lograrán tronchar el avance de la Revolución Victoriosa de 1959, ni podrán derrotarnos, ni enfrentarnos con nuestras Fuerzas Armadas”.
Señaló que, de la forma más insolente e inescrupulosa, en esta oportunidad, los pagados, los apátridas, los vende patria, al servicio del Imperio (Estados Unidos), pretenden autoproclamarse “representantes” de las más auténticas luchas, victorias, reclamos y sentimientos del heroico y revolucionario pueblo cubano.
“¿Cuándo se ha visto que el terrorismo y el fascismo sean pacíficos?”, cuestionó el colectivo en el texto.
La Asociación remarcó que quienes intentan subvertir el orden constitucional en Cuba son los mismos reformistas y anexionistas a quienes Carlos Manuel de Céspedes, Ignacio Agramonte, Máximo Gómez, Antonio Maceo y José Martí tuvieron que enfrentar de la forma más decidida.
Calificó de vil conspiración, financiada contra la amada patria la pretendida marcha del 15 de noviembre.
“Es notable el carácter ilícito de la marcha que se pretende encubrir en inexistentes ‘derechos constitucionales’. Constituye una nueva, completa y flagrante agresión organizada y pagada desde los Estados Unidos”, denunció.
Añadió que, además, es parte y continuidad de la misma operación político-comunicacional que tuvo su máxima expresión en los hechos del 11 de julio y que emplea como principal plataforma las redes sociales en internet.
La obsesión de Estados Unidos para recolonizar a Cuba perdura en el tiempo y la esencia del conflicto bilateral entre ambos países se mantiene invariable: recuperar la dominación sobre la Isla y transformar su sistema político, económico y social, contra la voluntad soberana del pueblo cubano de defender su independencia y mantener el Socialismo, afirmó.
Explicó que el ejercicio del derecho de manifestación, plasmado en la ley cubana no respalda esta marcha programada, porque no se realiza en armonía con los presupuestos y principios constitucionales de nuestro país.
La Asociación aseveró que los fines pacíficos de esta acción son, altamente cuestionables, a partir del antecedente que marcó el 11 de julio, así como por los intereses y actores que están detrás de la misma.
Señaló que tratan de hacer creer que ellos son genuinos y que actúan para el bien de los cubanos, sin embargo, jamás han sugerido levantar el cruel e injusto bloqueo, para aliviar la situación de nuestro querido pueblo en medio de la pandemia y la actual crisis económica mundial.
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