La creación de un avión eléctrico ruso es factible, pero para ello es necesario resolver una serie de dificultades técnicas, indicó en declaraciones a la agencia de noticias TASS.
Chémezov señaló que la posibilidad de lograrlo es real y recordó que hace pocos meses, en la última exposición aeroespacial MAKS 2021, fueron presentadas las primeras muestras rusas de este tipo de máquinas, que entre sus ventajas está la de desprender una menor huella de carbono.
“Pero existen dificultades que superar, principalmente con el sistema de alimentación, que debe estar formado por toda una serie de elementos, desde baterías convencionales hasta supercondensadores y un sistema de control”, apuntó.
El jefe del consorcio ruso encargado de la producción y exportación de productos industriales de alta tecnología para los sectores civiles y de defensa expresó que ya trabajan en la electrificación de los aviones. “Hay un buen trabajo técnico empezado en varias unidades”, dijo.
Subrayó también que el desarrollo de los motores alimentados por hidrógeno está en marcha, para lo cual se formó un grupo de trabajo encargado del proyecto.
Yuri Shmotin, diseñador principal de la Corporación Unida de Motores, perteneciente a Rostec, declaró que la empresa estudia dos tecnologías para su fabricación: por combustión directa del hidrógeno en turbinas de gas modificadas y a través de la conversión de combustible en energía eléctrica mediante baterías de combustible.
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