Así lo afirmó Rolando Gómez, encargado de Negocios de la Embajada de Cuba en Brasil, al diario Correio Braziliense, a propósito de nuevos intentos desestabilizadores instigados y financiados desde Washington, como parte de una política hostil de más de 60 años contra la nación caribeña.
«Los enemigos de la Revolución Cubana han intentado, sin éxito, reconstruir las manifestaciones fallidas y los intentos desestabilizadores del 11 de julio», señaló el diplomático.
Denunció que «Estados Unidos, con su contrarrevolución cubana en Florida, promovió, financió y organizó otro evento subversivo, el 15 de noviembre, contra el sistema elegido por la gran mayoría de los cubanos en un referéndum nacional, que es parte de nuestra Constitución».
Refirió que Brasil no permitiría manifestaciones organizadas y financiadas por potencias extranjeras destinadas a cambiar el régimen de gobierno.
Para Gómez, “los cubanos no permitirán, ni aceptarán, presiones, injerencias y amenazas de ningún tipo. No toleraremos que nadie afecte la celebración de nuestro pueblo, este 15 de noviembre, fecha que marca el reinicio del curso escolar y la apertura total al turismo internacional”.
También celebraremos, agregó, “con gran alegría, la victoria sobre la Covid-19 con vacunas cubanas y la supervivencia ante la enorme guerra con la que los gobiernos de Estados Unidos nos asfixian económicamente, intensificada por Donald Trump y mantenida por Joe Biden”, recalcó.
El embajador apuesta además a que Estados Unidos ejercerá una presión extrema en torno a una «gran campaña mediática internacional» para afectar la imagen de Cuba.
Advirtió que la maniobra está condenada al fracaso. «Todo el mundo sabe que mienten, calumnian y manipulan los hechos. Al final, la verdad prevalece: la voluntad de resistencia de un pueblo unido para preservar su independencia y soberanía, ante los históricos anhelos de dominación estadounidense sobre nuestro país», subrayó.
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