Tras casi dos años de cierres y restricciones, Cuba abre hoy sus fronteras con el fin de reconquistar a los clientes y recuperar el espacio ganado en el mercado internacional del turismo y reactivar su economía, lacerada profundamente por la agudización del bloqueo, en medio de la pandemia, impuesto por Estados Unidos.
Luego de un serio enfrentamiento a la pandemia de la Covid-19 y una masiva campaña de inmunización, Cuba decidió abrir sus fronteras y reiniciar las actividades turísticas, con el aval de contar al cierre del pasado viernes con 27 millones 39 mil 584 dosis administradas de las vacunas propias Soberana 02, Soberana Plus y Abdala.
De acuerdo con las autoridades sanitarias del país antillano, ello ha permitido que ocho millones 307 mil 956 personas, que representan el 74,3 por ciento de la población cubana cuenten con el esquema de inmunización completo, el principal aval que muestra la nación para recibir a sus visitantes a partir de este lunes.
A ese panorama se suma la implementación y cumplimiento del programa Un Turismo más higiénico y seguro, mediante el cual más de dos mil 300 instalaciones fueron certificadas por estrictos protocolos sanitarios que garantizan la seguridad de los visitantes, en su conjunto sometidas a trabajos de mantenimiento, reparaciones y mejoras en sus servicios y ofertas.
Esa es una de las razones de los festejos, pero también se suma el inicio del curso escolar de manera presencial con el regreso de más de 718 mil 400 niños a clases.
Los colombianos se darán cita frente a la embajada de Cuba en esta capital grupos musicales para continuar la fiesta iniciada ayer que duró todo el día, y para repeler cualquier provocación ante algunos llamados amenazantes proferidos en las redes sociales.
Tales anuncios de acciones se suman al plan desestabilizador que desde Estados Unidos fomenta una campaña de descrédito contra Cuba con el fin de subvertir el orden constitucional.
El Movimiento Colombiano de Solidaridad, representantes del Partido Comunes, de organizaciones sindicales y cubanos residentes en este país advirtieron que se unirán a las celebraciones y nadie aguará la fiesta cubana.
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