La nación ibérica adquirió la obra ‘Crucifixión’, del emblemático pintor Doménikos Theotokópoulos, que será destinada a la colección del Museo del Greco en Toledo.
El Ministerio de Cultura y Deporte resaltó este viernes la compra de una de las creaciones del Greco, uno de los maestros de las artes plásticas más prestigiosos de la civilización occidental, con un estilo marcado por las influencias de los países en que vivió.
La pintura será la primera obra del artista que
ingrese en los fondos del museo desde que fuera fundado en 1910 por el II Marqués de la Vega-Inclán.
Obtenida por un importe de 1,5 millones de euros, la pieza supone una oportunidad excelente para incrementar las colecciones públicas
con una obra de extraordinaria calidad y de un autor tan destacado, indicó el Ministerio de Cultura.
Griego oriundo de Creta, donde residió hasta los 26 años, vivió en Venecia y luego en Roma. Fue perfilando su estilo a partir de su acercamiento a las obras de Tiziano y Tintoretto en la ciudad de los canales, pero también en el aprendizaje del manierismo de Miguel Angel en la capital italiana.
Finalmente se afincó en Toledo, España, en 1577, donde desarrolló el resto de su carrera hasta su deceso a los 72 años de edad en 1614. Ello le valió ser considerado el más español de los griegos.
El caballero de la mano en el pecho (1578-1580) es quizá la obra más notable y conocida de El Greco. Fue cuando intentaba ganarse las simpatías del rey Felipe II para convertirse en pintor de la Corte, algo que nunca logró.
Ello tal vez explica la intensidad de su trabajo en su primera etapa española y el desarrollo de una habilidad especial para los retratos. En El caballero (…), se consideraba de identidad desconocida, hasta que se determinó que el protagonista de la obra era el marqués de Montemayor y notario mayor de Toledo.
Como muchas de sus obras, está en exhibición en el Museo del Prado de Madrid.
“Crucifixión” gozaba previamente de un nivel de protección que limitaba la transacción de compra-venta al mercado nacional, por ser una obra relevante del patrimonio cultural español.
El Greco hizo distintas versiones acerca del tema de la crucifixión entre 1571 y 1577, todas ellas con un Cristo en la cruz como elemento central, basado en un diseño de Miguel Angel.
Según la fuente, la nueva adquisición es, probablemente, la más tardía de esas variantes y la culminación de todas ellas, muy probablemente concebida entre los últimos años de la estancia del pintor en Roma y los sus primeros tiempos en Toledo.
La expectativa mayor, de acuerdo con los expertos, es que “Crucifixión” completa los fondos del Museo del Greco con una obra que permitirá explicar, de una forma didáctica, la transformación del estilo del artista en sus distintas etapas, desde su Creta natal, pasando por Italia, hasta Toledo.
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