Madrid, nov (Prensa Latina) Aunque todavía es poco probable que algún país en el mundo pueda declararse libre de Covid-19 de forma absoluta, España se precia de haber superado momentos terribles y tener bajo control la pandemia.
Sería, en síntesis, la esencia del balance anual del país ibérico después de haber librado una cruenta batalla contra el nuevo coronavirus. Más de cinco millones de contagiados, cerca de 88 mil decesos es el saldo epidemiológico luego de dos años.
A pesar de que las cuitas políticas desempeñaron un papel en ocasiones sórdido en el enfrentamiento al flagelo, al final se impuso la firmeza del Gobierno de izquierda encabezado por el socialista Pedro Sánchez, que mantuvo la idea de aplicar duras restricciones y avanzar con la vacunación.
Al comienzo de la pandemia, España se convirtió en uno de las naciones más golpeadas del mundo y con el liderazgo indeseado en Europa. El primer caso diagnosticado positivo a la Covid-19 se dio en San Sebastián de la Gomera el 31 de enero de 2020, y el primer fallecimiento el 13 de febrero del mismo año en Valencia.
-ALTIBAJOS La incredulidad de la población del orbe a aceptar que una crisis sanitaria podía literalmente paralizar al planeta, terminó pasándole factura a España y prácticamente a toda la comunidad internacional.
Pese a los llamados a la mesura por parte de los científicos en la puesta en marcha de una vacuna milagrosa, el virus no cesó de expandirse. En la península se estableció un estado de alarma el 14 de marzo de 2020, pero fue levantado en junio cuando se creía que el nuevo coronavirus estaba en declive.
Como al resto del mundo, resultó un espejismo. Dilatado por los deseos y las necesidades económicas, la administración española se vio obligada a restablecer el estado de alarma a finales de octubre de 2020.
Si bien la percepción de riesgo había ganado consciencia y las restricciones funcionaban hasta cierto punto, olas de contagios de mayor o menor relieve hicieron aconsejable volver a cerrar fronteras.
-TURISMO A LA BAJA
Considerada la segunda potencia mundial del turismo detrás de Francia, la baja en la industria sin chimeneas de España hizo resentir la economía a niveles insospechados y pasó de recibir a más de 70 millones de viajeros por año, a cifras que oscilaron entre cinco y 20 millones, según la región.
Cataluña y Canarias lideraron la recepción de turistas en 2020 con más de tres millones y medio cada una, seguidas por Andalucía y Comunidad Valenciana, cerca de tres millones respectivamente, Baleares y Madrid con más de un millón 700 mil visitantes cada una.
La contracción del PIB en 2020 (caída del 11 por ciento) fue más pronunciada en España que en el resto de las economías desarrolladas, debido al mayor peso de las actividades como el turismo precisamente y las pequeñas y medianas empresas (pymes).
Todo ello trajo como consecuencia el aumento del desempleo, con particular impacto en el sector juvenil, crisis en la educación en todos los segmentos, disminución de la producción y un efecto devastador en los renglones de servicios.
-CLAVE VACUNACION
Empero, el 27 de diciembre de 2020 comenzó en España la campaña de vacunación con el inmunógeno estadounidense alemán Pfizer-BioNTech en medio de un crudo invierno.
El Gobierno, ante el surgimiento de nuevas variantes del coronavirus, se puso la meta de vacunar al menos al 70 por ciento de la población con doble pauta hacia el mes de agosto de 2021. Días más, días menos, se cumplió el objetivo.
Y comenzó la relajación de las medidas restrictivas a mediados de año, desde quitar la obligatoriedad de la mascarilla en espacios exteriores, hasta permitir eventos sociales y apertura de lugares de ocio con horarios amplios, junto con el retorno del público a los estadios.
En paralelo, España trabaja en la terminación de un proyecto de candidato vacunal propio. De hecho, son 12 los intentos de búsqueda, sin embargo hay uno que marcha a toda vela, en segunda fase de ensayos.
Se trata de un experimento que adelantan los laboratorios Hipra, basado en dos proteínas recombinantes estructuralmente similares, una correspondiente a la variante alfa y otra, a la variante beta, que se unen formando una estructura única llamada dímero.
Está acompañada de un adyuvante que incrementa la respuesta inmunológica.
«Esta combinación es capaz de generar una respuesta frente a una de las proteínas del virus SARS-CoV-2, conocida como proteína S (de spike, llamada proteína espiga en español)», señalaron los especialistas.
Mientras tanto, el critério predominante es que la única respuesta “mágica” existente es la vacunación, gratuita para toda la ciudadanía y con la posibilidad de aplicar una tercera dosis de refuerzo en el futuro cercano.
De momento, el 90 por ciento de españoles y residentes tienen pauta completa.
rmh/ft
*Corresponsal jefe de Prensa Latina em España