James dio a conocer la decisión en un breve comunicado, apenas horas después de que su oficina informara sobre la posible citación al expresidente Donald Trump para que declare en una investigación civil por fraude.
La magistrada busca interrogar al exmandatario bajo juramento como parte del proceso sobre sus actividades empresariales, lo que ocurre un momento en el cual también se realiza una pesquisa criminal paralela contra el republicano.
Este jueves, el diario The New York Times reportó que su oficina pretende entrevistar a Trump el 7 de enero.
«He llegado a la conclusión de que debo continuar como fiscal general”, subrayó al insistir que una serie de investigaciones y casos importantes están en marcha –añadió-, y «tengo la intención de terminar el trabajo».
Este cambio remodelará la carrera por el máximo puesto del Estado, sacudida en octubre cuando James, popular por sus batallas contra la Asociación Nacional del Rifle o sus indagaciones sobre el exgobernador Andrew Cuomo, entró en la lid.
Al propio tiempo representa un espaldarazo a la gobernadora Kathy Hochul (D), quien ascendió al puesto tras la renuncia de Cuomo a principios de este año debido a más de una decena de acusaciones por acoso sexual.
James contrató hace dos semanas a Gabby Seay, una organizadora sindical reconocida a nivel nacional, para gestionar su campaña, y también contaba ya con el apoyo de destacados demócratas de la ciudad de Nueva York y sus alrededores, donde en su día fue Defensora del Pueblo.
Las encuestas muestran que ella habría comenzado con una batalla cuesta arriba contra Hochul, la primera mujer en ser gobernadora de Nueva York.
Un sondeo del Instituto de Investigación del Siena College publicado esta semana mostraba a Hochul a la cabeza de los demócratas con un 36 por ciento, por delante del 18 por ciento que apoyaba a James.
El tanteo reveló que tanto una como la otra tienen una valoración favorable muy similar entre los votantes de la fuerza azul: el 57 por ciento se inclinó por la actual gobernadora en funciones y el 56 por la fiscal general.
En octubre la afroamericana afirmó que se postulaba para gobernadora por considerar que cuenta con «la experiencia, la visión y la valentía para enfrentar a los poderosos en nombre de todos los neoyorquinos” y aseguró que demandó a la Administración Trump 76 veces.
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