“Llegó el momento del matrimonio igualitario en el país. No podemos tener familias de primera y segunda categoría”, dijo el mandatario en la ceremonia efectuada en el Palacio de La Moneda, donde reconoció que en el pasado tuvo una visión distinta sobre este tema.
De acuerdo con el presidente, “todos los niños con un papá y una mamá, con dos papás o dos mamás deben tener los mismos derechos y la protección en materias tan importantes como el cuidado personal, la pensión de alimentos o los derechos hereditarios”.
La normativa, que entrará en vigor 90 días después de su publicación en el Diario Oficial, reemplaza los términos de madre y padre por el concepto de progenitor, y los de marido y mujer por el de cónyuges.
Esa ley permite a las parejas homoparentales la adopción y la posibilidad de recurrir a técnicas de reproducción asistida.
También le otorga todos y cada uno de los deberes y derechos de que gozan en la actualidad los matrimonios heterosexuales, regula lo relativo a los bienes y garantiza las pensiones por viudez.
Asimismo garantiza la no discriminación en el cuidado de los hijos por la orientación sexual, identidad o expresión de género.
Para el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) esta decisión constituye un paso histórico y decisivo en el avance y la consolidación de los derechos humanos de las parejas del mismo sexo, que venían siendo discriminadas y vulneradas.
De acuerdo con Movilh, en una reciente encuesta a mil 878 parejas homoparentales, 82 por ciento dijeron esperar la entrada en vigencia de la normativa para casarse.
En América Latina el matrimonio igualitario está legalizado en Costa Rica, Ecuador, Colombia, Brasil, Uruguay y Argentina; así como en varios estados de México.
jha/car