En conferencia de prensa tras reunirse con la canciller indonesia, Retno Marsudi, Blinken recordó que el mes pasado el presidente Joseph Biden dijo a su homólogo de China, Xi Jinping, que compartían la gran responsabilidad de evitar que la rivalidad entre ambos países desembocara en un conflicto.
Asumimos esa responsabilizad con la mayor seriedad posible, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense, cuyas declaraciones durante sus dos días de estancia en Indonesia apuntan en sentido contrario.
Poco antes, en Beijing, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Wang Wenbin, apuntó que si en verdad EEUU quiere la paz debiera dejar de instigar conflictos entre los países de la zona y de enviar buques y aviones de guerra al Mar de China Meridional.
Las declaraciones del funcionario chino fueron una palmaria respuesta a los dichos de Blinken durante una conferencia esta mañana en la Universidad de Indonesia.
En esa ocasión, el secretario de Estado norteamericano prometió que su país trabajará con los de Asia-Pacífico para detener las “acciones agresivas” de China en la región.
Estamos decididos a garantizar la libertad de navegación en el Mar de China Meridional, donde los actos agresivos de Beijing amenazan un movimiento comercial valorado en tres billones de dólares al año, dijo.
Pese a los acuerdos entre China y Taiwán, violados una y otra vez por Washington, el funcionario norteamericano insistió en la autonomía de ese territorio y aseguró que EEUU “quiere asegurar la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán”.
Indonesia es la primera parada de una gira de Blinken por el sudeste asiático, su primera por la región desde que asumió el cargo. Los otros puntos del itinerario son Malasia, adonde viajará hoy, y Tailandia.
Su presencia por estas latitudes es la segunda de un funcionario estadounidense de primer nivel, pues antes, en agosto, la vicepresidenta Kamala Harris visitó Singapur y Vietnam, también con la clara intención de contrarrestar el protagonismo de China en el sudeste asiático.
Pero en ninguno de los dos países Harris logró siquiera declaraciones que apuntarán a una alianza o a acciones concretas contra Beijing.
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