Siria generaba antes de la guerra nueve mil 500 megavatios e incluso exportaba electricidad a Líbano, mientras en la actualidad sólo dispone de dos mil 300 megavatios y el país necesita al menos seis mil, aclaró el jefe del Ejecutivo en una entrevista con la televisión nacional Al-Suriya.
Precisó el titular que a diferencia de los primeros años del conflicto cuando extensas zonas estaban dominadas por grupos terroristas, el gobierno actualmente alimenta con electricidad al 80 por ciento del territorio nacional liberado por el ejército sirio, lo cual aumentó las horas de cortes de luz.
En cuanto al gas, Arnous aclaró que la producción actual oscila entre 7.5 y 8 millones de metros cúbicos por día, mientras que antes del conflicto eran 20 millones, y prometió duplicar la cantidad producida durante el segundo semestre del año en curso lo cual repercutiría, según aseguró, en la situación energética nacional.
Indicó que apenas se extraen 20 mil barriles de petróleo por día debido a la ocupación de los yacimientos por el ejército estadounidense, lo cual obligó el país a importar durante 2021 unos cinco millones de toneladas de derivados del crudo a un costo de 1,6 mil millones de dólares.
Antes de la guerra, producíamos 385 mil barriles de petróleo y exportábamos la mitad y el presupuesto dependía en gran medida de estos ingresos, agregó el primer ministro. Siria enfrenta desde marzo de 2011 una guerra en la que sus enemigos en particular, Estados Unidos e Israel, emplearon el terrorismo y la intervención militar directa para derrocar al gobierno legítimo de Damasco, y durante los últimos tres años pasaron a una nueva fase representada por la guerra económica.
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