Según un comunicado de la Casa Blanca, el mandatario fue actualizado la víspera sobre las operaciones rusas cerca de la frontera de Ucrania y también se abordaron los esfuerzos diplomáticos en curso de cara a reducir las tensiones en esa zona.
El asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, y el consejero Steve Ricchetti se reunieron con el gobernante demócrata en la residencia de Camp David, mientras que otros funcionarios lo hicieron de forma virtual, indica el texto.
Biden reiteró una vez más sus amenazas de tomar acciones contra Rusia y apuntó que se coordinan “medidas de disuasión” con aliados y socios de Estados Unidos, incluida la entrega de asistencia.
De hecho, el sábado llegó al aeropuerto Boríspol, de Kiev, la primera partida de 90 toneladas de armamento letal desde la nación norteña, indican reportes locales.
Esta reunión de Biden se produce un día después de que el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, se diera cita en Ginebra con el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov.
Washington y Moscú realizan negociaciones luego de que las tensiones en torno a Ucrania se agravaran pues Occidente acusa a Rusia de una supuesta acumulación de sus tropas en la frontera de cara a preparar una posible invasión.
La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, pidió a Occidente que cese de contribuir con la militarización de Ucrania y de arrastrar a ese país a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Según dijo recientemente la vocera, las justificaciones sobre los supuestos preparativos de Moscú para invadir Ucrania son un intento de encubrir la preparación de las propias provocaciones de países occidentales.
También ha denunciado que se desarrolla una agresiva campaña de información antirrusa, mientras la OTAN intenta aumentar sus actividades militares en el área.
Moscú ve en tales acciones una amenaza a su seguridad nacional y defiende el derecho a mover sus fuerzas dentro de su propio territorio, según lo estime conveniente.
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