El comunicado aclara, no obstante, que la embajada británica en Kiev permanece abierta y seguirá realizando sus labores esenciales.
El anuncio sobre la retirada de parte del personal diplomático y familiares hecho este lunes por Londres sigue a otro similar que hizo Washington el fin de semana.
El Reino Unido y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) acusan a Rusia de querer invadir Ucrania, cuyo gobierno solicitó la membresía de la alianza militar liderada por Estados Unidos.
De acuerdo con Washington, el Kremlin envió más de 100 mil soldados a las inmediaciones de la frontera con Ucrania, pero el gobierno ruso niega tener planes de atacar, y sostiene que sus tropas se mueven dentro de su propio territorio con fines puramente defensivos.
La víspera, la embajada rusa en Londres llamó al gobierno británico a poner fin a sus declaraciones provocativas sobre la situación alrededor de Ucrania, y en su lugar, contribuir con esfuerzos diplomáticos reales a la seguridad europea.
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