El incremento de contagios por la Covid-19 y la circulación de la variante Ómicron en las provincias exige implementar acciones de control en los estadios, alojamiento y transportación de los atletas en consonancia con los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud Pública para el certamen.
Según publica JIT, los conjuntos participantes serán sometidos a pruebas de diagnóstico un día antes de moverse hacia otra provincia y cada colectivo médico evaluará la termometría en tres momentos del día a los atletas, entrenadores y otros miembros de las delegaciones.
Las medidas refieren que ningún pelotero con síntomas deberá estar en juego y en caso de detectarse un positivo a la Covid-19 debe ser separado de inmediato del resto de la selección.
Durante los partidos solo serán privados de usar el nasobuco los jugadores y los árbitros en el terreno; mientras, los atletas en el dogout si deben llevar la mascarilla.
A los estadios no podrán acudir personas con síntomas respiratorios y cada territorio evaluará las condiciones higiénico-epidemiológicas para incrementar la entrada de público del 50 al 70 por ciento donde sea posible.
Otras disposiciones sanitarias establecidas para la Serie Nacional incluyen la desinfección de superficies y medios deportivos antes y después de culminar cada encuentro en ambos club house, además del resto de los locales y desarrollar acciones encaminadas a facilitar el distanciamiento físico como el marcaje de los espacios en las gradas.
La edición 61 del principal espectáculo deportivo en Cuba arrancó el domingo último en el estadio Mártires de Barbados, la casa de los vigentes campeones de Granma.
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