Con rosas blancas, la bandera de la estrella solitaria y un busto del héroe nacional de Cuba como testigos, los participantes recordaron su vida y su obra en el evento político-cultural celebrado en el espacio público Maurice Carême de la comuna de Anderlecht.
La embajadora cubana Yaira Jiménez destacó la vigencia del ideario martiano y la guía que ha representado para el pueblo de la mayor de las Antillas.
En ese sentido, mencionó su lucha en el siglo XIX por la unidad latinoamericana y sus advertencias sobre la agresividad de Estados Unidos, hostilidad que enfrentan el país caribeño –blanco de un bloqueo económico recrudecido a niveles inéditos- y otros de la región en la actualidad.
Un momento especial en el acto fue el anuncio realizado por la jefa de la Misión de Venezuela en Bruselas, Claudia Salerno, quien resaltó que el Consejo del municipio Libertador de Caracas confirió a Martí la condición de Hijo Ilustre de la capital de la nación sudamericana.
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