La iniciativa contempla penas entre 10 y 30 años contra los llamados coyotes y fue impulsada por el presidente Alejandro Giammattei, quien la presentó el 19 de enero a la Comisión de Gobernación y en menos de cuatro días obtuvo dictamen favorable y entró a discusión del pleno.
Este martes concluyó su tercer debate, lecturas por artículos y redacción final por los diputados, quienes plantearon enmiendas no solo a favor del incremento de años en prisión, sino también sanciones económicas.
También hay distinciones para quienes incurran en tráfico ilícito de guatemaltecos y de extranjeros.
Ya en su discurso en el Congreso, durante la presentación de su segundo informe de gestión, el 14 de enero último, el Jefe de Estado pidió a los legisladores su apoyo a la propuesta y hoy logró apoyo mayoritario de la bancada Vamos (partido en el poder) y de aliados tradicionales.
Sin embargo, diputados opositores de Winaq, Semilla y Urng-Maiz recordaron en sus intervenciones que para detener la migración irregular hace falta un abordaje integral del tema y en primer lugar, crear oportunidades.
Otros argumentaron que de nada servía aumentar las penas si no se planteaban mejoras en los procesos de investigación del Ministerio Público y de la Policía Nacional civil para que se cumplan.
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