Las movilizaciones se llevaron a cabo desde la mañana en varias ciudades de este país andino, donde centenares de docentes demandaron al gobierno nacional la implementación de la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI).
Equiparación salarial, la reinserción de los despedidos durante la emergencia nacional por la pandemia de la Covid-19 y presupuesto justo para el correcto desarrollo del sector fueron algunos de los principales pedidos.
Acompañados de banderas rojas y carteles con sus exigencias, los maestros desfilaron por las calles principales de varias capitales de provincia.
En el caso de Quito, los manifestantes se concentraron en la sede central del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y desde allí avanzaron por el centro, liderados por la directiva de la Unión Nacional de Educadores (UNE).
«Aquí estamos, justamente exigiendo las condiciones que nos merecemos», aseguró Isabel Vargas, presidenta de la UNE.
La acción fue convocada por la Unión para esta jornada, cuando se cumplieron los seis meses concedidos por la Corte Constitucional para que el gobierno nacional y el parlamento definieran sobre la implementación de la LOEI, normativa por la cual lucharon los docentes hasta con una huelga de hambre de 32 días, de julio a agosto último.
Las movilizaciones se llevaron a cabo en al menos 17 de las 24 provincias de este territorio sudamericano.
Según alertaron algunos directivos de UNE, esta fue la primera movilización de varias que planean contra medidas consideradas de corte neoliberal, como el irrespeto a una regulación aprobada por las instancias pertinentes.
El descontento con la postura del ejecutivo aumentó con el reciente anuncio de la administración nacional de aumentar salarios en la Policía Nacional.
Otras organizaciones sociales como la Federación de Estudiantes Secundarios, el Frente Unitario de Trabajadores y la Confederación de Nacionalidades Indígenas apoyan la posición de los educadores.
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