Esta es la primera vez que se aplica un amplio estudio nacional sobre las prácticas culturales de los portugueses en varios campos de la cultura, destacó Guilherme de Oliveira Martins, administrador de de la Fundación Calouste Gulbenkian que auspició la pesquisa.
La encuesta, comprendida a partir del 2020, respondió a la necesidad de conocer los hábitos de lectura de la sociedad y, según sus resultados, el 61 por ciento de los ciudadanos no había leído un solo libro en papel, y del 39 por ciento que afirmó haberlo leído, la mayoría lee poco.
De acuerdo con el ICS, el universo de los que leen está formado mayoritariamente por pequeños lectores, los cuales consumen entre uno y cinco libros impresos, seguido de lectores medianos, que leen entre seis y 20 ejemplares; así como los grandes lectores, quienes superan los 20 títulos en un año.
Sobre la lectura de libros digitales, el porcentaje desciende aún más, ya que solo uno de cada 10 encuestados aseguró que lee en ese soporte, precisa De Oliveira y enfatizó en las cifras que arrojaron un descenso en los hábitos lectores recogidos en la Encuesta de Lectura realizada en 2007.
En el caso de las edades, los más jóvenes y aquellos cuyos padres tienen o tuvieron mayor formación académica reconocieron con mayor frecuencia este apoyo familiar en la investigación, que señala cómo la democratización y acceso a la educación aporta a las generaciones venideras.
La pesquisa involucró a ciudadanos mayores de 15 años residentes en el país, con 89 preguntas sobre prácticas culturales y se centró en distintas áreas del consumo cultural a través de internet, la televisión y la radio; la asistencia a bibliotecas, museos, galerías de arte y monumentos; conciertos y al cine.
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