Durante su intervención ante la Asamblea Nacional del país centroamericano, como parte de su visita oficial, el alto funcionario advirtió la existencia de relaciones bilaterales basadas en el respeto mutuo, la confianza y los principios de no intromisión en los asuntos internos de estados soberanos.
La dinámica de esos vínculos, subrayó, tiene como máximos representantes a los presidentes Vladimir Putin y Daniel Ortega, quienes decidieron ampliar la cooperación estratégica en todas las esferas y de ahí el interés de potenciar ese intercambio por la vía legislativa.
Volodin calificó de crucial el impulso del diálogo desde el parlamento, base de la amistad y el desarrollo, y mencionó el agradecimiento de los ciudadanos rusos al pueblo nicaragüense por el apoyo al retorno de Crimea y el reconocimiento de la independencia de Abjasia y Osetia del Sur.
Igualmente, valoró al mandatario Ortega como uno de los primeros en declarar la importancia de la independencia de las repúblicas populares de Donetsk y Lugans y recordó el golpe de Estado en Ucrania, hace ocho años, y la llegada al gobierno de los oligarcas y ultranacionalistas.
A su juicio, ello representó el abandono de su soberanía y la ocupación del territorio ucraniano por Estados Unidos; asimismo, aseguró que los consejeros norteamericanos resultaron nombrados en todas las instituciones de poder y advirtió el peligro del arribo de cuantiosos armamentos a ese territorio.
“Todos esos años Kiev hizo caso omiso de los acuerdos de Minsk y realizó la política de genocidio ante las poblaciones de la región del Donbas, que demandaban el respeto a sus derechos y libertades”, puntualizó el presidente de la Duma Estatal de Rusia.
Las autoridades ucranianas no promovieron el diálogo, afirmó, emplearon contra ellos equipos pesados, con un saldo de miles de víctimas y heridos y provocaron el éxodo masivo y expresó que la operación pacificadora de Putin tiene el objetivo de prevenir la catástrofe humanitaria y la guerra a gran escala.
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