Según el comunicado, los fondos de los clientes en las cuentas vinculadas a dichas tarjetas están totalmente conservados y disponibles. “Las transacciones con ellas se procesan dentro del país en el Sistema Nacional de Tarjetas de Pago y no se ven afectadas por las sanciones”, indicó.
Sin embargo, el texto advierte que las transacciones transfronterizas con esas tarjetas no estarán disponibles a partir de los próximos días, lo cual se aplica tanto al pago de compras en tiendas extranjeras en línea como a su uso en otras naciones.
La información de Moscú aclaró la situación del país con respecto a las declaraciones de esas empresas estadounidenses, emitidas este sábado, sobre su decisión de suspender las operaciones de sus tarjetas en este país y en el extranjero.
El Banco Central de Rusia señaló que los titulares de esas tarjetas en el país podrán realizar operaciones en cajeros automáticos, pagar con sus tarjetas y hacer transferencias entre tarjetas en el territorio nacional, donde sus servicios tienen gran aceptación entre la población.
Rusia estableció un sistema nacional de pagos capaz de garantizar los pagos nacionales de forma fluida en respuesta a las decisiones de esas empresas, en marzo de 2014, de suspender los servicios y operaciones de pago a clientes de algunos bancos y sus filiales debido a las medidas punitivas estadounidenses.
En julio de ese año, el país creó el Sistema Nacional de Tarjetas de Pago, convertido en el operador del sistema de pagos Mir. El Banco Central de Rusia posee el 100 por ciento de las acciones del Sistema Nacional de Tarjetas de Pago, explicó la agencia de noticias TASS.
Después que el mandatario ruso anunció una operación militar en Ucrania el pasado 24 de febrero, Occidente arreció sus sanciones económicas contra la nación euroasiática.
Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Japón y los países de la Unión Europea apuntaron a sectores clave del comercio, las finanzas, la energía, las exportaciones y la aviación de Rusia.
Las medidas unilaterales implicaron la desconexión de algunos bancos del sistema de pago internacional Swift, el cierre del espacio aéreo europeo y de otros países para sus aerolíneas y la paralización de las reservas internacionales del Banco Central de Rusia, entre otras sanciones.
Moscú ha lanzado decretos presidenciales que establecen medidas económicas para protegerse de las restricciones económicas, financieras y comerciales extranjeras que enfrenta el país.
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