La protesta podría alcanzar carácter nacional el próximo jueves de no existir una respuesta convincente del Gobierno paraguayo a estas demandas, declaró el secretario general de la organización, Diego Bogarín, a radio Monumental.
El sindicalista denunció también el incumplimiento de leyes laborales por parte del Gobierno de Mario Abdo Benítez y de agroexportadoras multinacionales con las que se firmaron acuerdos.
Según dijo, ello se conjuga con la vulnerabilidad del sector ante el incremento del precio de carburantes y de la canasta básica.
“La realidad es que hoy en día estamos todos en un zapato porque la necesidad es muy alta para los trabajadores del transporte y también para los propietarios”, insistió el Bogarín.
Hasta ahora, agregó el representante sindical, no se ha respetado la tabla de flete ni hay sanciones para las agroexportadoras multinacionales o para los empresarios que violan la norma consensuada.
De acuerdo con Bogarín, hay aproximadamente 19 mil afiliados a su sindicato y, de ellos, entre el 45 y el 50 por ciento están en movimiento, mientras el resto espera en sus casas a mejores precios de flete para salir a la ruta.
Según el medio local Caritas, los trabajadores exigen a las autoridades sincerarse con los precios de combustibles, pues nadie sabe dónde se compran ni a cuánto.
Por si fuera poco, el representante de la empresa de hidrocarburos Shell en Paraguay, Luis Ortega, anunció una nueva subida en los costos para este fin de semana, tras solo unos días del anterior incremento.
mgt/dla/mer