Stoltenberg afirmó este martes, durante una rueda de prensa en el marco de su visita a Letonia, que la alianza militar debe evitar una escalada, luego de que el presidente ruso, Vladímir Putin, advirtió sobre las consecuencias de la intervención de otras naciones.
El líder de la OTAN señaló que «tenemos la responsabilidad de garantizar que el conflicto no se intensifique y se extienda más allá de Ucrania. Eso sería aun más peligroso, destructivo e incluso más mortal, y la situación podría salirse de control».
Putin dijo el sábado último que Moscú verá como una intervención las acciones de otros países para establecer una zona de exclusión aérea sobre Ucrania, y señaló que se considerará a esas naciones «participantes en el conflicto, sin importar a qué organizaciones pertenezcan”.
Sin embargo, un día después, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, aseguró durante una visita a Moldavia, que Washington continúa «trabajando de forma activa» para lograr que Polonia envíe aviones caza a Kiev.
El primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, se apuró en desmentir hace unas horas tales afirmaciones y dijo que «no proporcionaremos aviones de combate a Ucrania y tampoco pondremos a su disposición nuestros aeropuertos».
mgt/ort