El funcionario declaró que se establecieron más de 400 laboratorios de pruebas a nivel nacional, ya sean operados por el sector privado o el gobierno.
Dizon recordó que al inicio de la pandemia, a principios del 2020, Filipinas solo contaba con una sola instalación científica con los requerimientos necesarios para detectar el coronavirus SARS Cov-2.
Ahora contamos con centenares de laboratorios bien equipados, y podemos usarlos para evaluar otras enfermedades como el dengue, la tuberculosis y otros padecimientos crónicos. Tenemos toda esta red de instalaciones que pueden servir mejor a nuestro sistema de salud pública. Así que ese es el plan, dijo.
Dizon reconoció que, a pesar de tener muchos laboratorios en todo el país, la estrategia gubernamental en las pruebas de Covid-19 se ha basado en el riesgo.
Por esta razón, el Departamento de Salud planea maximizar el uso de estos laboratorios y expandir sus operaciones, utilizando de esa forma todas sus capacidades, añadió.
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