Esa disposición ratificada en tercer debate por 46 votos favor,10 en contra y una abstención; y que podría ser sancionada o vetada por el presidente de la República, reforma el Código Electoral.
La iniciativa es vista por analistas como señal de las primeras alianzas de organizaciones políticas de cara a las elecciones generales de 2024.
En la sesión de la Asamblea Nacional, la víspera, precisa el diario La Prensa, los representantes del gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD) sumaron votos junto a los del Movimiento Liberal Republicano Nacionalista, para respaldar a 15 legisladores de Cambio Democrático(CD) que enfrentan un proceso de expulsión y revocatoria en su colectivo.
Sus detractores aseguran que el pacto podría estar ligado, incluso, a la reelección de Cristiano Adames, del PRD, como presidente del parlamento unicameral.
El artículo 151 de la Constitución panameña y el 488 del Código Electoral establecen que el partido político al que se le haya adjudicado un curul podrá revocar el mandato del diputado principal o suplente que haya postulado o inscrito.
A juicio del abogado Ernesto Cedeño el proyecto tiene visos de inconstitucionalidad y señala que lo que debe hacer un diputado es procurar respetar lo que está en la ley de leyes el Estado de derecho, aunque no les guste.
En torno a lo que se avecina, el jurista explicó al diario La Estrella de Panamá que si el jefe de Estado veta ese proyecto deberá remitirlo a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) por inexequible, pero si se convierte en ley de la República, cualquier ciudadano la puede demandar ante la CSJ.
Por su parte, el presidente del Colegio Nacional de Abogados, Juan Carlos Araúz, indicó que la facultad de la revocatoria de mandato no solo es de los electores, sino también que la Constitución la otorga a los partidos políticos.
Agregó que esa facultad en manos de los partidos no es absoluta y, por ende, para invocarla siempre se debe revisar qué han hecho y cómo disentir si en un momento determinado afecta su rol.
Consultado si el proyecto aprobado iría en contra de lo que señala la Constitución, Araúz manifestó que hay dos derechos enfrentados: el de disentir de un diputado; y por el otro, la prerrogativa de los partidos a revocar.
“Mientras que el primero es un derecho individual, el segundo tiene primero que constatar que el partido ha cumplido sus obligaciones”, precisó.
Para el presidente del CD, Rómulo Roux, el proyecto desdice de la Asamblea Nacional y lo que hace es blindar a quienes siguen la línea del PRD, sin importarles los electores ni el país, solo servirse a sí mismos.
mgt/ga