El llamado esquema para las familias de Ucrania se puso en práctica el 4 de marzo pasado después de que las autoridades de inmigración recibieron una lluvia de críticas por la demora en tramitar los permisos de entrada.
Aunque el nuevo sistema garantiza a las personas aprobadas permanecer durante tres años en Reino Unido, con derecho a trabajar, estudiar y recibir ayuda estatal, Londres dijo que comprobará cada solicitud por cuestiones de seguridad.
Según trascendió, unos 31 mil 500 ucranianos que abandonaron su país después que Rusia lanzó el 24 de febrero pasado lo que el presidente Vladimir Putin calificó como una operación militar especial para repeler la agresión de las fuerzas nacionalistas en la región autónoma de Donbass, solicitaron visa de entrada al Reino Unido.
El gobierno británico también invitó a la población a acoger durante al menos seis meses a los refugiados de esa nación del este de Europa que no tengan familiares en el país.
De acuerdo con el ministro de Salud Pública, Sajid Javid, más de 150 mil personas ya ofrecieron sus hogares.
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